miércoles, 14 de noviembre de 2012

¿Es la moral propiedad privada de los creyentes?


Con frecuencia escuchamos hablar a uno u otro líder religioso o algún adepto de
determinado credo, acerca de la moral como los propietarios del concepto o los únicos
dueños de las acciones que definen o no a una persona socialmente como correcta o
de buenos valores.

Entonces ¿por qué sentimos como NO creyentes que actuamos correctamente frente a
determinadas situaciones?, ceder el puesto en el vehículo de transporte público a una
persona en condiciones especiales, protestar contra el maltrato animal, sentir
compasión por una persona en desgracia. ¿Es el concepto de moral, tan nuestro cómo
lo es de cualquier creyente? ¿Existe un vínculo innegable entre religión y moral?
Analicemos definiciones de la palabra moral.

Diccionario de la real academia de la lengua española

“Perteneciente o relativo a las acciones o caracteres de las personas desde el punto de
vista de la bondad o la malicia”…Esta definición incluye indistintamente cualquier
acción del ser humano sean buenas o malas.

“Que no corresponde al orden jurídico, sino al fuero interno o al respeto humano”…La
exime de cualquier vinculación con la ley dándole carácter de apreciación de terceros
en cuanto a los actos de determinada persona o de autocrítica.

Wikipedia:

“Son las normas por las que se rige la conducta del ser humano en concordancia con la
sociedad y consigo mismo”… Comienza diciendo: “Son las normas por las que se rige”
es decir que según su definición la moral es imperativa (Tú debes). Continúa diciendo:
“la conducta del ser humano en concordancia con la sociedad”…Aquí advertimos que
la moral no es absoluta, varía de acuerdo con los entornos geográfico y cultural. Es
decir un acto permitido moralmente en un entorno cristiano, tal vez no lo sea en un
entorno asiático budista o musulmán.

Otra definición

“La existencia de acciones y actividades susceptibles de valoración moral, se
fundamenta en el ser humano como sujeto de actos voluntarios”…La moral está
vinculada  exclusivamente con actos voluntarios.



Veamos ahora las raíces de la palabra

“La palabra moral tiene su origen en el término latino mores, cuyo significado es
costumbres, por lo tanto moral no acarrea de por si el concepto de malo o bueno”
entonces me pregunto yo, ¿en qué momento terminó adquiriendo un carácter positivo
o de normas deseadas?..Continúa: “se diferencia de la ética en que está última
reflexiona racionalmente sobre las morales con la finalidad de encontrar principios
racionales que determinen las acciones éticamente correctas y las acciones éticamente
incorrectas”…De acuerdo con esto, la Ética y la Moral son dos conceptos totalmente
diferentes. Si siguiéramos la definición inicial de cada concepto tendríamos que uno (la
moral) se refiere a las acciones costumbres y actos que definen una cultura y el otro (la
ética) es la disciplina que lo estudia y le da valores cualitativos.

Si dijimos antes que la palabra moral no acarrea de por sí el concepto de bueno o
malo, ¿En qué momento se prostituyó la moral? En cierto sentido estoy de acuerdo
con Nietszche  en que la moral se corrompe en el momento es que es vinculada con la
voluntad de dios, el siguiente es un aparte de su libro el anticristo “La mentira del
orden moral invadió todo el campo de la filosofía moderna ¿Qué significa el orden
moral del mundo? Que hay, de una vez y para siempre, una voluntad de dios respecto
de lo que el hombre debe hacer o dejar de hacer, que el valor de un pueblo, de un
individuo, se mide por el grado de obediencia prestada a la voluntad divina; que en los
destinos de un pueblo, de un individuo, se muestra como dominante la voluntad de
dios”. Refiriéndonos particularmente al dios judeo-cristiano sabemos que la voluntad
de dios se basa en el libro más contradictorio y ambiguo que se haya escrito jamás.
Esta es para mí la razón de la perversión del concepto de moral, la voluntad de dios
depende en cada época de la interpretación personal y conveniencias del rey,
gobernador, regente, ministro, papa, sacerdote, o pastor de turno. Si este rejunte de
contradicciones y estupideces es la base de la voluntad de dios y la moral del mundo
depende de ella, con razón la moral es la hija pervertida de los padres de gran parte de
la civilización moderna.

Apartes de “El anticristo” de Nietzsche “La voluntad de dios estaba fijada durante
dilatado tiempo: La desgracia fue que el pueblo se alejó de ella…Ya Moisés había
recibido la revelación de la voluntad de dios… ¿Qué sucedió? El sacerdote había
formulado, con rigor y pedantería, de una vez para siempre, hasta los grandes y
pequeños impuestos que se debían pagar, lo que quiere tener, lo que es voluntad de
dios…Desde entonces todas las cosas de la vida quedaban reglamentadas de modo que
el sacerdote era en todas partes indispensable, en todas las vicisitudes naturales de la
vida, en el nacimiento, en el matrimonio, en las enfermedades, en la muerte, para no
hablar del sacrificio, aparece el santo parásito para quitarles su carácter natural, o
según su lenguaje, para santificarlas” hasta aquí va la cita de Nietzche. Vemos
entonces como el iluminado de turno garantizaba su participación en la sociedad y se
hacía imprescindible interpretando a su conveniencia la “voluntad de dios”. Lo que
determina finalmente que el concepto de moral cambie su esencia por el ingreso de
conceptos como el pecado, la tentación, etc.,

Nietzche en su libro Genealogía de la Moral, explica según su opinión, que el origen
social de los conceptos “malo” y “bueno” son más una articulación de la conveniencia
de quien ostentaba el poder…cito “El derecho del señor a dar nombres llega tan lejos
que deberíamos permitirnos el concebir también el origen del lenguaje como una
exteriorización del poder de los que dominan” Hasta aquí llega la cita de Nietzche, para
luego concluir que la palabra bueno no está necesariamente ligada a acciones
bondadosas, sino que más bien está ligada al concepto de útil o conveniente y apoya
su tesis citando ejemplos de la transición de la palabra en varios idiomas en los cuales
inicialmente designaba adjetivos o sustantivos propios de la nobleza o la realeza, como
noble, puro, cabellos rubios, etc., por otro lado palabras como miserable, plebeyo, o
incluso negro, en los mismos idiomas terminaron designando palabras negativas o de
conductas reprochables. 

A pesar del aparente carácter no jurídico del concepto moral, hoy día muchos países,
particularmente los que tienen una estrecha relación estado iglesia castigan a los
ciudadanos que no siguen las normas morales establecidas, inclusive en países
declarados laicos, en algunas ocasiones representantes del estamento judicial han
hecho uso de este concepto en sus fallos. En 1940 el juez McGeehan creyente católico
recalcitrante, declaró nulo el acto administrativo que había hecho la junta directiva de
la Universidad de New York, acto en el que se nombraba a Bertrand Russell como
catedrático de dicha institución, y una de las razones expresadas en el fallo fue que
Russell era un hombre de mala moral.